Israel Hernández subrayó el derecho humano de vivir en un estado en el que se respete el marco legal, sin miedo y con certeza del futuro


En un México controlado por la delincuencia, hallar caminos que lleven a pacificar el país es el gran reto para las comisiones estatales y la nacional de derechos humanos consideró el Ombudsperson de Morelos, Raúl Israel Hernández Cruz.

Ratificado este año para dirigir la Comisión de Derechos Humanos estatal (CDHM), el titular de este organismo autónomo subrayó la legitimidad que tienen los mexicanos y mexicanas de ejercer su derecho humano de vivir en un estado en el que se respete el marco legal, en libertad, sin miedo y con certeza del futuro.

“La gravedad de los casos (de inseguridad) ha crecido en los últimos años. El incremento de las actividades relacionadas con la delincuencia organizada, la impunidad prevaleciente y la complicidad de elementos que participan en tareas de seguridad, genera una latente vulnerabilidad de la población y un mayor riesgo para los grupos que requieren atención prioritaria”, expuso al conmemorar 30 años de autonomía de la CDHM.

Es en este sentido, dijo, que las comisiones de derechos humanos no deben permitir que el Estado se desmantele, deteriore y desmorone cediendo ante la barbarie en regresión a tiempos medievales.

”Sin que sea exagerado decirlo, pues basta con leer los encabezados de todos los días”, invitó.

Tras recordar que en julio de 1992, la CDHM se convirtió por decreto en un organismo público independiente de los tres poderes estatales, destacó que para los próximos años el reto es lograr que las autoridades acaten las recomendaciones y reparen el daño consecuencia de sus actos.

Asimismo, continuó, tener mayor incidencia en las políticas públicas, optimizar los recursos al máximo, reducir los gastos de la Comisión y tener como centro atender a las víctimas de violaciones de derechos humanos y a quienes están en riesgo de serlo.

“Por esta razón, debemos seguir trabajando en la protección, defensa, promoción, observancia, estudio y divulgación de los derechos correspondientes a grupos vulnerables, a través de programas de atención específicos”, destacó.

Entre los grupos de la población que requieren atención urgente en materia de derechos humanos Hernández Cruz destacó a niñas, niños y adolescentes; personas de 60 años o más; las mujeres; la comunidad LGBTTTIQ+, las personas víctimas de trata; los migrantes y comunidades indígenas.

No pasó por alto los derechos humanos de las personas desaparecidas y sus familias, así como el de aquellas privadas de su libertad en los diversos centros penitenciarios de la entidad; además de quienes se han visto afectados por deficiencias en materia de salud .

“El derecho a la salud y a la seguridad son temas que se atienden de manera transversal en la CDHM, ya que las personas sufren afectaciones frecuentemente con relación a la atención y servicios médicos”, recordó.

El Ombudsperson reiteró su compromiso de proteger y defender los derechos humanos de las y los morelenses, a sabiendas de que en ocasiones este trabajo incomoda a los poderes y a las instituciones.

“Hemos tenido etapas en las que la relación ha sido muy tensa con el Poder Ejecutivo, incluso hemos sufrido ataques a la institución y en el ámbito personal también”, sin embargo, reconoció, “ha valido el esfuerzo”.

En el acto conmemorativo, Hernández Cruz hizo un reconocimiento a sus antecesores al frente de la CDH Morelos: Carlos Celis Salazar, José Francisco Coronato Rodríguez, Sergio Valdespín Pérez, José Fausto Gutiérrez Aragón, Lucero Ivonne Benítez Villaseñor y Jorge Arturo Olivares Brito.

Estuvieron presentes los integrantes de la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos, autoridades locales y nacionales, titulares de organismos autónomos y representantes de la sociedad civil.