Con la reforma el secretario ejecutivo del INE, Edmundo Jacobo Molina, cabeza operativa del instituto, debe dejar el cargo


Este jueves
fue publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el llamado Plan B de reformas electorales.

Luego de que la oposición le exigiera al presidente Andrés Manuel López Obrador la publicación de dichas reformas, se espera la presentación de una serie de recursos de inconstitucionalidad.

El Plan B consistió en la adición y derogación de diversas disposiciones de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, de la Ley General de Partidos Políticos, de la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y se expide la Ley General de los Medios de Impugnación en Materia Electoral.

El Plan B activa una serie de plazos para que el Instituto Nacional Electoral (INE) y otras instituciones deban realizar cambios en sus estructuras. El más inmediato es el cese automático del secretario ejecutivo del INE, Edmundo Jacobo Molina cabeza de los procesos operativos en el organismo desde hace 15 años.

Jacobo Molina ha estado en esa posición desde 2008 —cuando el INE era Instituto Federal Electoral (IFE)—; fue nombrado secretario ejecutivo en 2014, cuando el IFE se transformó en INE, y reelecto por el Consejo General en marzo de 2020. Su cargo concluiría hasta 2026, pero según el artículo 17 transitorio de la reforma, deberá dejar el cargo de inmediato.

“Dada la modificación de las facultades de la Secretaría Ejecutiva con la entrada en vigor del presente decreto, la persona titular de dicho cargo cesará en sus funciones a partir de su publicación”, señala el artículo en cuestión.