El pueblo está saqueado, es un derecho vivir en libertad, en paz y en seguridad”, dijo el líder religioso

El cardenal de Guadalajara, Francisco Robles Ortega, señaló que es responsabilidad de los tres niveles de gobierno la ola de violencia que azota  a Teocaltiche, Jalisco, y exigió una colaboración conjunta para devolver la calma a esta comunidad afectada.

En conferencia de prensa celebrada en la arquidiócesis de Guadalajara, el líder religioso destacó la necesidad de que la Federación, el estado y el gobierno local trabajen juntos para combatir el crimen organizado que ha llevado a la violencia y la inseguridad en Teocaltiche. 

“Aunque el combate al crimen organizado le compete a la Federación, es esencial que las tres autoridades se coordinen y colaboren estrechamente para lograr resultados efectivos”, resaltó.

El cardenal Robles Ortega también hizo referencia al silencio del alcalde de Teocaltiche, Juan Manuel Vallejo Pedroza, en relación con el hallazgo de centros de monitoreo clandestinos y narcotúneles en la región. 

Señaló que, en muchas ocasiones, las autoridades locales se lavan las manos alegando que el narcotráfico es responsabilidad exclusiva del gobierno de la República, lo que contribuye a la impunidad y a la falta de acciones concretas para resolver la situación. 

En cuanto a las estadísticas proporcionadas recientemente por la Fiscalía del Estado, que reportan solo un par de robos en todo el municipio durante el año, el cardenal fue enfático en su respuesta. 

“De qué sirve si solo hay dos robos cuando a la población completa le arrebataron la paz, la tranquilidad y la libertad. No hay patrón de medida, son dos robos, pero el pueblo está tomado, amedrentado, sujeto a los caprichos de la autoridad. El pueblo está saqueado, es un derecho vivir en libertad, en paz y en seguridad”, concluyó. 

Por su parte, las autoridades policiacas del estado de Jalisco informaron que uno de los detenidos a principios de octubre en Teocaltiche durante el operativo en que aseguraron casas de monitoreo clandestino, ya fue llevado ante un juez y vinculado a proceso.