Después de verse acorralado y con posibilidad de enfrentar un juicio político, el gobernador de Morelos recibió ayuda desde la CDMX para aliviar la presión en su contra y darle un golpe a la oposición en el estado
Por Luis Alberto Beltrán | Twitter: @reporteroyosoy
Hasta el momento podemos decir que el marcador en el tablero político de Morelos registra 1-0 a favor del equipo de Cuauhtémoc Blanco.
Pero esa ventaja la obtuvo con la ayuda de cachirules, quienes desde la Ciudad de México operaron para quitar del camino a la persona que tuvo la posibilidad de meterlo a la cárcel y no lo hizo. Al menos tres personas jugaron un papel fundamental en esta coartada: por un lado, la fiscal capitalina Ernestina Godoy, la ex jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum y el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador.
El ex futbolista profesional se vio acorralado por el equipo contario que ya tenía en mente iniciarle un juicio político y darles cauce a las denuncias que hay en su contra por su presunta relación con grupos de la delincuencia organizada y enriquecimiento ilícito.
El contra ataque vino fuerte y agarraron dormido al fiscal Uriel Carmona, quien no vio por donde le llegaron las acusaciones por delitos del fuero común y una orden de aprehensión para meterlo a la cárcel.
Todos en la famosa mesa para la construcción de la paz celebraron el gol, hasta el hermano del Cuau, Ulises Bravo, anda celebrando esta jugada que puso en jaque a la oposición y hasta la debilitó, ya que hasta el momento las estrategias que han hecho para empatar el marcador no les han funcionado.
La última fue la controversia constitucional que interpuso ante la Corte el congreso local, la cual fue desechada de plano por ser notoriamente improcedente. Es decir, no hay ninguna posibilidad de que se pueda revertir la orden para detener a un fiscal con fuero federal y meterlo a las celdas del reclusorio sur.
Ulises Bravo también ha llevado a cabo una estrategia para eliminar de Morena a quienes aspiran a la candidatura por la gubernatura. Recientemente fue designado por Mario Delgado como delegado en funciones de presidente de este partido en Morelos, lo que le da la posibilidad de conducir los procesos internos donde hay más de 12 personas que quieren sustituir a su hermano en el 2024.
Así, podrá darle el gafete de capitán al preferido o preferida de su hermano para que pueda contender en las próximas elecciones, pero si eso sucede podría darse una desbandada que deje sin refuerzos al equipo del Cuau.
Esta victoria con sabor a triunfo la están disfrutando al máximo en palacio de gobierno, pero pocos o nadie se ha acercado con los familiares de las víctimas para externar su solidaridad por el retraso u obstrucción de la justicia en las que pudo haber incurrido el fiscal y hacer justicia.
Uriel Carmona es uno de los personajes incómodos en la administración de Cuauhtémoc Blanco, el mismo presidente López Obrador se ha manifestado en contra del trabajo de los fiscales y en especial el de Morelos por haber sido designado por el congreso en el último año de la gestión del ex gobernador Graco Ramírez.
A veces cuando un equipo lleva una ligera ventaja puede cometer el error de confiarse y es ahí donde puede llegar un contra golpe del rival.
