Tedros Adhanom, director general de la Organización Mundial para la Salud, fue a la ciudad siria de Alepo, para visitar hospitales y refugios en la zona devastada

Conformen pasan las horas crece la tragedia tras el terremoto de 7.8 grado que sacudió el lunes 6 de febrero, el sur de Turquía y el noroeste de Siria.

Hasta este sábado 25 mil 400 personas han muerto;  21 mil 848 víctimas fatales se contabilizan en Turquía y 3 mil 553 decesos, en Siria. Además, las autoridades estiman en total, 12 mil 141 los edificios destruidos o gravemente dañados.

Este sábado llegó a la ciudad Siria de Alepo, Tedros Adhanom, director general de la Organización Mundial para la Salud quien llegó en un avión con cerca de 37 toneladas de suministros médicos de emergencia. El funcionario dijo que el domingo 12 de febrero de 2023, llegará otra ronda con más de 30 toneladas de ayuda.

Según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), al menos 870 mil personas precisan urgentemente comida y, solo en Siria, 5.3 millones de personas se quedaron sin casa. Por su parte, el Programa Mundial de Alimentos pidió 77 millones de dólares para aportar raciones a al menos 590 mil personas desplazadas a causa del terremoto en Turquía y 284 mil en Siria.

La OMS estima que el sismo podría afectar a 23 millones de personas en los dos países “incluyendo cinco millones de personas vulnerables”. Asimismo, las organizaciones humanitarias temen especialmente la propagación del cólera, que resurgió en Siria.