La vigilancia fue solicitada por la familia de El Neto, ante el temor de que pudiera presentarse algún ataque

Este martes 10 de enero fueron velados los restos del criminal, Ernesto Alfredo Piñón de la Cruz, alias El Neto, en una funeraria en Chihuahua.

Al exterior de la funeraria Perches, en el cruce de las avenidas Ignacio de la Peña y 5 de mayo, en Chihuahua, se pudo observar una fuerte vigilancia de personal militar que resguardaban las capillas, así como por seguridad de los familiares de El Neto y empleados de la negociación.

Los militares se encontraban en las esquinas aledañas de las capillas vigilando en todo momento el perímetro, portando armas largas.

Se dijo que está vigilancia fue solicitada por la misma familia de El Neto, para poder velar sus restos de forma segura, ante el temor de que pudiera presentarse algún ataque.

Hasta la noche del lunes, empleados de la funeraria Perches se habían negado a dar información sobre el funeral de El Neto, a pesar de que fueron ellos quienes recogieron el cuerpo de las instalaciones del Servicio Médico Forense.

Todo se manejó con absoluta discreción, a petición de la misma familia de el líder de Los Mexicles, según lo dieron a conocer los trabajadores de Perches.

El Neto se escapó junto con otros 29 internos del Centro de Reinserción Social Estatal No. 3 el pasado domingo 1 de enero, tras un ataque orquestado desde el exterior.

Cuatro días después fue abatido por las autoridades en las avenidas Carlos Amaya y Cartagena, tras un intenso operativo encabezado por la Fiscalía General del Estado para dar con su captura.