Solo una jugada política del Presidente Andrés Manuel López Obrador podría salvar al orgullo de Tepito, pues no le conviene la caía de un gobernador de la 4T en pleno proceso electoral

Por Luis Alberto Beltrán | Twitter: @reporteroyosoy

En Morelos ya se encuentra todo listo para ponerle fin a la carrera política de Cuauhtémoc Blanco.

El congreso dará trámite a la denuncia de juicio político y se dará vista a la fiscalía anticorrupción de las omisiones en las que ha incurrido el comisionado de seguridad, Antonio Ortiz Guarneros, por las que se han disparado los índices delictivos.

No solo tratarán de acabar con el ex futbolista, sino con todos aquellos que han propiciado que los criminales actúen con toda impunidad y hasta se puedan tomar fotos con él.

En la recta final de su mandato, Cuauhtémoc Blanco sigue considerado como uno de los peores gobernadores del país y el más mediocre que ha tenido Morelos.

Solo una jugada política del Presidente Andrés Manuel López Obrador podría salvar al orgullo de Tepito, pues no le conviene la caía de un gobernador de la 4T en pleno proceso electoral.

El Cuau tiene en su contra a 15 de los 20 diputados locales -incluidos a tres de Morena- quienes ya le demostraron en reiteradas ocasiones que no están para rendirle pleitesía, y tampoco están dispuestos a protegerlo, sino obligarlo a que pague todo el daño que le ha hecho a Morelos.

El congreso local prepara una lluvia de solicitudes para que la entidad superior de auditoría y fiscalización (ESAF) trabaje a marchas forzadas e auditorías a diversas dependencias en las que se presume que el Cuau desvio recursos, privilegio a contratistas, adjudicó de manera directa millonarias obras a proveedores de su círculo más cercano.

Así le facilitará el camino a la Fiscalía Anticorrupción para que pueda abrir carpetas de investigación y darles el curso legal, para ir quitando del camino a piezas fundamentales de su gabinete.

Y la primera secretaría en auditar será la Movilidad y Transporte donde se presume que hubo adjudicaciones directas a empresas con una sobre compra de placas y tarjetas de circulación, así como triangulación de recursos para otros fines que no estaban etiquetados.

En dicha dependencia estuvo al frente durante estos cuatro años quien es considerado el funcionario más corrupto del gobierno de Morelos, Víctor Mercado Salgado -hoy coordinador de asesores de la oficina de la gubernatura-, nada más y nada menos que la corcholata favorita de Cuauhtémoc Blanco.

Así que el mandatario tendrá que buscar un acuerdo político y protección al más alto nivel para que no abran los cajones de las oficinas gubernamentales y descubran documentos que puedan comprometerlo.

De lo contrario tendrá que enfrentar las acusaciones y demostrar que sigue al pie de la letra los principios de no robar y no traicionar al pueblo.