Aunque en Morelos tiene pésimos resultados, Blanco Bravo puede dar la sorpresa como ya lo hizo dos veces en Morelos cuando ganó Cuernavaca y luego la gubernatura
Por Luis Alberto Beltrán | Twitter: @reporteroyosoy
Menospreciar la fama de Cuauhtémoc Blanco puede ser iluso y hasta peligroso.
Dejar que participe en el proceso interno de Morena en busca de la candidatura para Jefe de Gobierno de la Ciudad de México es un arma de doble filo.
Si se pretende que Omar García Harfuch llegue fortalecido para encabezar los comités de defensa de la cuarta transformación en la capital del país, lo mejor sería no permitir que el ex futbolista sea incluido en la encuesta, porque podría restarle votos y debilitarlo o de plano ganarle y dejarlo mal parado.
De darse ese lejano panorama, es importante saber que lo inesperado existe y estar mentalmente preparado para enfrentarlo.
En Morelos ya ocurrió dos veces. En la primera ocasión nadie pensó que el partido que lo impulsó como candidato a la presidencia municipal de Cuernavaca (PSD) pudiera mantener el registro y mucho menos que ganaría, por eso lo dejaron inscribirse en la contienda, pese a no cumplir con todos los requisitos que marca la ley como fue el caso de la residencia.
De alguna u otra forma libró las impugnaciones y ganó en las urnas. La fama como seleccionado nacional y el hartazgo que había en la clase política llevaron a Blanco a convertirse en alcalde de Cuernavaca donde poco o nada pudo hacer por la Ciudad de la Eterna Primavera, porque tenía a todo mundo en su contra. Ese fue el pretexto perfecto para buscar la candidatura a gobernador y la suerte le sonrió por segunda ocasión.
Con todo y su incompetencia, en 2018 las encuestas colocaron nuevamente al Cuau en la preferencia de los morelenses y ni todo el aparato político pudo frenar el tsunami de Morena. Nadie, ni el propio Cuauhtémoc Blanco, creyeron que había obtenido el triunfo.
Hoy Cuauhtémoc Blanco prepara maletas para dejar Morelos e irse a la contienda interna de Morena para la CDMX, pese a los nulos resultados que tiene en sus ya casi cinco años como gobernador. La carta de presentación que les llevará a los capitalinos es que tiene al estado sumido en la violencia, sin desarrollo económico, obra pública, enfrentado con todos los sectores de la sociedad y arrastrando varias denuncias por presunto enriquecimiento ilícito y vínculos con grupos del crimen organizado.
Parece que en el Comité Ejecutivo Nacional de Morena ya analizan estos escenarios y no pondrán en riesgo el triunfo en la Ciudad de México, pues ven que Blanco está rodeado de aduladores y aprovechados que alimentan su arrogancia y sus falsas ilusiones. Si lo dejan a un lado la suerte del Cuau podría terminarse.
Por otro lado, los aspirantes para sucederlo en el cargo ya aceitaron su maquinaria y se declararon listos para encabeza los comités de defensa de la Cuarta Transformación en Morelos.
Hasta el momento, los nombres que se manejen de mujeres son la senadora Lucía Meza Guzmán; la ex directora de la Lotería Nacional, Margarita González Saravia; la diputada local, Tania Valentina Rodríguez, y la secretaria de administración del gobierno del estado, Sandra Anaya.
Del lado de los varones están el alcalde de Jojutla, Juan Ángel Flores Bustamante; el edil de Jiutepec, Rafael Reyes; el coordinador de política y de gobierno de la Presidencia de la República; Rabindranath Salazar; el ex diputado local, Juan Salgado Brito; y el coordinador de asesores de la oficina de la gubernatura de Morelos, Víctor Mercado.
Morena ya publicó la convocatoria para los nueve estados donde habrá elecciones en 2024 y ha dicho que serían 5 hombres y 4 mujeres los que competirían en los comicios para garantizar la paridad y llegar a tener 32 entidades del color guinda.
Primero se aplicará un sondeo de reconocimiento y en la segunda fase tendrán que medirse tres mujeres y tres hombres. En la mayoría de las encuestas que se han realizado hasta el momento ubican en el primer escaño a la senadora Lucy Meza, seguido del alcalde Juan Ángel Flores.
Meza tiene una intención del voto favorable, dos a uno, incluso frente los aspirantes de la oposición, además de que todos los cargos que ha tenido los ha ganado por la vía del sufragio. Sin embargo, Cuauhtémoc Blanco tratará de imponer a su candidato con la ayuda de su hermano Ulises Bravo, al frente de Morena.
Otra mujer que avanzó en las últimas semanas es Tania Valentina Rodríguez, quien ha subido puntos en las mediciones, dejando atrás a otras mujeres y hombres que han llenado de espectaculares los rincones del estado.
Morena ya advirtió que se elegirán a las mujeres más competitivas y con mejor posicionamiento, además de que valorará el trabajo de cada aspirante a favor de la 4T, lo que ya provocó lágrimas de algunos que buscan la coordinación estatal.
