Los ataques del lunes dejaron un saldo de tres transportistas y un civil asesinados así como un taxista desaparecido
Este martes Chilpancingo Guerrero amaneció sin unidades de transporte público en las calles tras los ataques del lunes cuando fueron asesinados tres choferes de las urvan y a una de ellas le prendieron fuego.
Las avenidas Juárez, Ignacio Ramírez, Álvarez y Guerrero, que normalmente se encuentran saturadas por decenas de camionetas dedicadas al transporte público, están libres de estas unidades y las personas buscan cómo transportarse.
Todo el transporte público que lleve a la capital de Guerrero está suspendido. No hay forma de llegar desde la sierra, las costas o la montaña.
Después de los ataques del lunes, en redes sociales de transportistas se difundieron mensajes de audio en los que los dirigentes de organizaciones llamaron a los choferes a tomar la decisión de manera personal, quienes quisieran seguir trabajando podían hacerlo y quienes decidieran suspender su servicio para protegerse y proteger sus unidades también podían hacerlo.
Finalmente las dirigencias de transportistas tomaron la decisión de llamar a todos a suspender actividad, que guardaran las unidades y se mantuvieran al tanto de nuevos mensajes.
La agresión ocurrida este lunes se suma a una serie de ataques armados en contra del transporte público en la capital guerrerense.
A principios de julio, cinco choferes de transporte público, entre colectivos y taxis, fueron asesinados y varias unidades incendiadas.
Según un recuento del periódico Reforma, en sólo un mes ha sido asesinados 18 choferes de taxis y camionetas de transporte público en la zona centro de Guerrero.
