No es la primera vez que Mariana está envuelta en la polémica por su actuar con niños

Una fotografía donde se aprecia a Mariana Rodríguez, titular de ‘Amar a Nuevo León», tirando unas gotas de agua sobre una niña desató una serie de críticas.

En la imagen, se puede ver a la esposa del gobernador Samuel García vertiendo un poco agua a una menor de edad que está sentada junto a ella.

Usuarios en redes sociales señalaron que una niña se acercó con Rodríguez Cantú para decirle que en su casa no tenía agua, hecho que presuntamente la funcionaria respondió con arrojándole agua a su cabeza.

Sin embargo, el material fue sacado de contexto ya que se trata de una captura de pantalla a un video publicado por Mariana Rodríguez en sus historias de Instagram.

Luego de convertirse en tendencia en Twitter, la influencer publicó una serie de historias en Instagram en las cuales reveló el origen de la imagen, así como el contexto de la misma. En una de ellas, detalló que estaba “jugando con Ximena. Dejen de hacer p*do donde no hay… Si algo le he dado a esta niña es paciencia y amor, mucho amor”.

A partir de la captura que se hizo viral en Twitter, miles de usuarios aseguraban que lo que sostenía Rodríguez Cantú era una botella y la atacaron por, supuestamente, tirarle agua encima a la niña Ximena. Sin embargo, en el video es visible que el objeto con el que ambas juegan es un biberón, el cual está diseñado para que el agua apenas salga del recipiente.

No es la primera vez que Mariana está envuelta en la polémica por su actuar con niños, cabe recordar un video donde calla a un menor de edad mientras sostenía una videollamada por su celular.

En el corto se puede ver a la esposa del Gobernador de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, mientras mantiene una videollamada con una persona de nombre Nohemí, pero al parecer el ruido que hace el niño que está junto a ella en la banqueta no la deja escuchar y lo calla en un par de ocasiones.

Primeramente con un ademán intenta decirle al niño que no haga ruido con el juguete que trae en su mano y en una segunda ocasión de plano le grita “eiii”, pidiéndole nuevamente que guarde silencio pero ahora en un tono brusco de voz.