Familiares de las víctimas denuncian que en la capital del estado no les quisieron recibir la denuncia; las imágenes las tenía en tiempo real Sedena y GN

Cuatro trabajadores de una empresa que instala y da mantenimiento a cámaras de videovigilancia, fueron secuestrados la tarde de este jueves en Apulco, Zacatecas por varios hombres armados que se presume son del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

La privación ilegal de la libertad de los cuatro trabajadores fue captada por una de las cámaras que acababan de revisar las víctimas, en el crucero de Apulco.

En el video que presenta en exclusiva Dominio Público Noticias se ve, a las 2:15 de la tarde, cuando un trabajador con gorra azul está a la altura de la cámara terminando de repararla y aparece una camioneta blanca polarizada de la que bajan algunos hombres con armas largas.

En la imagen se ve la camioneta de los trabajadores estacionada y aunque no se ven en la toma, hay otros empleados apoyando a su compañero que está arriba.

Segundos después aparece otra camioneta tipo pick up blanca de la que descienden una docena de hombres armados quienes se empiezan a distribuir en la zona.

A las 2:16 de la tarde, se ve a los cuatro trabajadores avanzar con los brazos alzados hacia los hombres armados que los encañonan; el de gorra azul aún trae puesto el arnés de seguridad, pues acababa de bajar del poste.

Entre varios de los sujetos armados los obligan a subir a la batea de la camioneta, incluso los golpean y se los llevan con todo y vehículo con dirección hacia el municipio de Nochistlán.

Dominio Público Noticias pudo constatar que esas imágenes se transmiten en tiempo real a las bases de SEDENA y la Guardia Nacional que están a unos minutos del lugar donde ocurrió la privación ilegal de la libertad y a pesar de eso los elementos de las fuerzas federales nunca llegaron en apoyo de las víctimas.

Al saber lo que había ocurrido, los familiares se dirigieron de inmediato a la capital del Estado para interponer la denuncia en la Fiscalía General pero les dijeron que no se configuraba como un secuestro pues «no han pedido dinero por ellos».

«Ni siquiera quisieron ver el video, quisimos mostrarlo para que vieran lo grave de este asunto y nos ignoraron», dijo a Dominio Público Noticias uno de los familiares.

En las oficinas de Derechos Humanos del estado vivieron una situación similar: les pusieron trabas para auxiliarlos pero después de varios minutos finalmente atendieron la queja.

Las cámaras de vigilancia en Apulco, Zacatecas han servido para evidenciar la presencia constante de convoyes de hombres armados, pese a las evidencias y los recientes enfrentamientos, la seguridad no se ha reforzado en esa zona, donde decenas de familias viven atemorizadas; muchas más han huido.