Mientras la dependencia asegura avances en el caso, otros hechos recientes han sembrado dudas sobre la solidez de las investigaciones.
La Fiscalía General del Estado de Jalisco confirmó que ya cuenta con una orden de aprehensión en contra de Francisco “N”, alias El Coyote, señalado como uno de los principales sospechosos en el asesinato de la regidora Cecilia Ruvalcaba, ocurrido el pasado 8 de mayo dentro del Hospital Comunitario del municipio de Teocaltiche.
El fiscal Salvador González de los Santos informó que la persona fue detenida inicialmente el 12 de mayo, y desde entonces ha sido identificada como uno de los cuatro presuntos atacantes que participaron en el crimen.
“Hasta ahorita lo único que tenemos es a esta persona que se le encontró el arma, al que se le nombra como ‘El Coyote’, y ya tenemos la orden de aprehensión en contra de él. Tenemos varios datos, seguimos con la investigación para corroborar”, dijo el fiscal.
Además de su presunta participación en el homicidio de la regidora, Francisco “N” también ha sido vinculado al asesinato del secretario general del Ayuntamiento de Teocaltiche, José Luis Pereida Robles, ocurrido el pasado 28 de abril en el centro del municipio.
Sin embargo, mientras la Fiscalía asegura avances en el caso, otros hechos recientes han sembrado dudas sobre la solidez de las investigaciones. El pasado 3 de junio, un juez federal del penal de Puente Grande ordenó la liberación de dos hombres que habían sido detenidos por la policía estatal en Teocaltiche bajo acusaciones de formar parte de la banda de El Coyote y ser “generadores de violencia” en la región.
Los detenidos, identificados como Juan Carlos “N”, alias El Camello, y José Luis “N”, fueron arrestados el 1 y 2 de junio en distintas colonias del municipio. Según el parte policial, ambos portaban armas de fuego al momento de su captura. Sin embargo, durante la audiencia, el juez determinó que las circunstancias de las detenciones no coincidían con lo reportado por los elementos policiacos.
De acuerdo con la resolución judicial, las detenciones fueron fortuitas y no se acreditó una causa legal para la revisión de los implicados, por lo que el juzgador ordenó su inmediata liberación. Pese a ello, un día antes, el secretario de Seguridad del estado, Juan Pablo Hernández, había declarado que ambos formaban parte del grupo liderado por El Coyote.
Este contraste entre los anuncios oficiales y las resoluciones judiciales ha generado críticas hacia las autoridades estatales, particularmente por la aparente debilidad de las investigaciones y el manejo mediático del caso. Aunque la Fiscalía asegura que continúa trabajando en robustecer las pruebas en torno a Francisco “N”, los tropiezos en otras detenciones han puesto en entredicho la efectividad de la estrategia de seguridad del gobierno de Jalisco.
Por lo pronto, Teocaltiche sigue siendo uno de los focos rojos de violencia en la entidad, mientras familiares de las víctimas y ciudadanos exigen justicia real, más allá de discursos y conferencias de prensa.