Una de las teorías sobre el tema refiere que el fiscal buscaría una especie de revancha tras las críticas que la comunidad científica  le hizo

Eduardo León|@EduardoLeonMx

En el México surrealista, ese mismo que incordió en su momento a Salvador Dalí, en tres años el gobierno federal ha acumulado una serie de irregularidades desde el presidente de la República, hasta la directora del Conacyt, lo cual resulta harto paradójico cuando el mantra del mandatario federal Andrés Manuel López Obrador (@lopezobrador_) ha sido desde su interminable campaña, el combate a la corrupción y la impunidad.

Todo ello ha quedado debidamente registrado en un sinnúmero de notas periodísticas para las cuáles López Obrador ha destinado horas enteras de sus “mañaneras”, denostando a los reporteros, medios y periodistas que lo exhiben a él y a su administración, pero que en ningún momento ha podido desmentir. Las descalificaciones ad hominem son cosa de todos los días.

Tratamiento que se aplica a prácticamente todo aquello que resulte un estorbo, un gasto o simplemente desagrade al ejecutivo federal, como ahora ocurre con el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y la intentona de la “autónoma” Fiscalía General de la República que encabeza Alejandro Gertz Manero, de enviar a un penal de máxima seguridad a 31 científicos, investigadores y ex funcionarios del Conacyt por el presunto lavado de dinero y acusaciones por delincuencia organizada por 244 millones de pesos del Foro Consultivo Científico y Tecnológico (FCCT), recursos previstos en la Ley de Ciencia y Tecnología.

Una de las teorías sobre el tema refiere que el Fiscal General Gertz Manero en realidad buscaría una especie de “revancha” tras las críticas que la comunidad científica habría hecho hacia el Fiscal, a quien durante 11 años se le negó ingresar al Sistema Nacional de Investigadores, lo cual no solo es falso sino fantasioso, puesto que ningún investigador ha cuestionado el ingreso del funcionario federal.

Lo que sí es cierto es que, de acuerdo con la Comisión Evaluadora, uno de los textos que presentó en su momento Gertz Manero para conseguir su pase al SIN III, incluía material plagiado, razón por la que la Comisión habría rechazado al aspirante en apego al reglamento que rige al Conacyt, pues la falta de ética por parte de un aspirante es razón suficiente para ello.

No obstante, gracias al aval de la directora María Elena Álvarez-Buylla (@ElenaBuylla) logró colarse al SNI en el nivel III, y a los 38 mil pesos mensuales que recibirá gracias a que el Consejo Nacional para la Prevención de la Discriminación, (Conapred), ordenara al Conacyt la “reparación del daño” a Gertz Manero, y que obligó a una sexta evaluación de los “méritos” del funcionario, que no fue sino la orden de facto para la inclusión -fraudulenta- de Alejandro Gertz al SNI. ¿Dónde quedó el combate a la corrupción? En el discurso.

Quizá esa sea la manera en la que María Elena Álvarez expresó su gratitud al Fiscal General de la República, luego que en marzo de 2020 un juez federal la denunciara por desacato a una suspensión definitiva concedida el 2 de octubre de 2019 luego de que el FCCT del Conacyt promoviera un juicio de amparo (1440/2019), precisamente porque ya las fricciones entre los investigadores y la funcionaria ya estaban a punto de ebullición, tan es así que a la fecha la FGR en este caso particular, jamás cumplió con su obligación judicial contra Álvarez-Buylla -¿Y el combate a la impunidad?-, con todo y que el asunto llegó a la Suprema Corte de Justicia de la Nación misma que determinó, sin llegar al fondo del asunto, que era legítimo que esos recursos llegaran al FCCT cuyo principal objeto y propósito de existir es proponer políticas de ciencia y tecnología al gobierno federal.

Dicho sea de paso, el presidente de México ha expresado en reiteradas ocasiones su animadversión a la ciencia y la técnica, en temas como la infraestructura petrolera, hidráulica y carretera.

El FCCT era una organización civil que debería recibir recursos federales a través del Conacyt, pues así está previsto en la Ley de Ciencia y Tecnología desde 2002… hasta ahora, pues ya no existe dicho Foro, gracias a las modificaciones a la ley que el Partido Morena promovió.

¿Qué va a ocurrir? En un Estado de Derecho es previsible que ante la falta de sustento jurídico ningún investigador, científico o exfuncionario vaya a pisar la cárcel, pero exhibe el nivel de influyentismo y abuso de poder por parte de la “Cuarta Transformación” y deja herido de muerte al Conacyt.

Ante la opinión pública, después de permitir que Gertz Manero ingresara de manera fraudulenta al SNI, quedará siempre la sombra de la duda y la suspicacia sobre cada uno de los nuevos investigadores que logren ingresar al Sistema, y sin recursos -pues cada año se reduce el presupuesto- se desincentiva la investigación y el interés por la ciencia desde el mismo aparato de gobierno, la expectativa de los mexicanos se reduce a esperar que la próxima administración federal revierta el daño hecho a la nación.