Muchas mujeres jóvenes ejercen el sexoservicio sin ser obligadas por alguien y han encontrado en redes sociales un espacio para ofertarse, buscando correr menos riesgos
Por: @newslabmx
Camila tiene 25 años y se dedica al sexoservicio como scort o acompañante por decisión propia. Dice que entró en el negocio hace unos meses porque los trabajos convencionales sólo ofrecen sueldos para sobrevivir.
Conoció de este «mundo» por medio de una amiga que le dijo que podía ganar mucho más que en un trabajo normal.
Y aunque la suma es muy atractiva admite que no es fácil estar con diferentes hombres y el sexo ya no es algo que disfrute.
Asegura que no es obligada por nadie y que a diferencia de la prostitución en la calle, gana más y corre menos riesgos.
«La diferencia entre una chica de calle, una prostituta con una scort es que a la escort la tratan bonito, muchos hombres que te regalan cosas, te invitan a desayunar a comer, te tratan como una reyna, no», dice Camila.
En entrevista con NewsLabmx dice que la contactan principalmente por Twitter y quienes más la buscan son hombres maduros y casados.
Abiertos siempre a la polémica en Dominio Público abordamos todos los temas, convencidos de que la realidad es algo que se debe debatir y no esconder.
