En el Día del Amor y la Amistad no van a trabajar empleados migrantes en Washington DC, Los Ángeles, Nueva York, Houston, Miami, Boston, Dallas, Atlanta, San Francisco y Filadelfia

Al grito de “¡No somos uno, no somos cien, somos millones, cuéntanos bien!” o “¿Qué queremos? Ciudadanía, ahora, ahora, ahora”, cientos de migrantes desafiaron un frío glacial para decirle al presidente Joe Biden que se sienten decepcionados y quieren que cumpla las promesas de la campaña electoral.
Cientos de migrantes se manifestaron el lunes frente a la Casa Blanca en Washington y otras ciudades de Estados Unidos y miles no trabajaron en respuesta a una convocatoria Un Día sin Inmigrantes, convocada por Carlos Eduardo Espina, influencer que convocó la protesta en la red socia TikTok, para pedir una reforma migratoria al presidente Joe Biden.
“Biden, ¿dónde está la reforma?”, “Reforma migratoria ahora”, “Filadelfia presente”, “Desde Querétaro por sí a la reforma migratoria”, se leía en las pancartas en el parque del Mall de Washington.
Un Día sin Inmigrantes generó movilizaciones en ciudades como Washington DC, Los Ángeles, Nueva York, Houston, Miami, Boston, Dallas, Atlanta, San Francisco y Filadelfia, entre otras, según información del portal undiasininmigrante.com
“Volvimos a poner el tema en la mesa, y eso ya es un gran logro porque en medio de la pandemia y los problemas económicos los indocumentados habíamos vuelto a ser invisibles”, dijo la peruana Lenka Mendoza.
Mendoza, que llegó hace 22 años al país y tiene un negocio de comida en Virginia, dijo que en menos de 15 días se logró reunir a más de mil personas frente a la Casa Blanca, “sin que le costara un peso a ninguna organización”.
Trabajadores migrantes en Nueva York hicieron un llamado, en el Día del Amor y la Amistad, a legisladores estatales para que les demuestren “su amor” aprobando un proyecto que permita establecer un programa de desempleo dirigido a indocumentados y aumentar el número de permisos para los vendedores ambulantes.
Igualmente reclamaron a la gobernadora del estado, Kathy Hochul, que se asignen 3 mil millones de dólares para el Fondo de los Trabajadores Excluidos, creado el año pasado para afectados por la pandemia que por su estatus legal no se vieron beneficiados por las ayudas del Congreso federal.
Trabajadoras domésticas, de lavandería, repartidores de comida y vendedores ambulantes, entre otros, acudieron a la plaza de Union Square, pese a las gélidas temperaturas, para pedir además que se eliminen las multas de hasta mil dólares que se imponen a vendedores ambulantes cuando carecen de permiso para esa actividad.
Biden impulsó una reforma migratoria y propuso una vía hacia la ciudadanía para 11 millones de indocumentados en un país que lleva 35 años sin una ley de este tipo, pero sus principales iniciativas se han estancado, sin apoyo suficiente en el Senado, donde se topa con una oposición frontal de los republicanos y de algún centrista.
En el marco de las protestas de Un Día sin Inmigrantes, la organización Nakasec recordó a los migrantes que pueden presionar a los miembros de su congreso para conseguir una reforma migratoria.
“Ya es hora de una reforma migratoria. No vamos a trabajar, no vamos a ir a la escuela y no vamos a gastar”, declaró la organización.
Invitó a llamar a los legisladores para conseguir una reforma migratoria, lo que no representa ningún tipo de riesgo para los migrantes indocumentados.
En 2020 los latinos fueron la mayor minoría con participación en las urnas y según algunas estimaciones votaron en alrededor de 70 por ciento por los demócratas y en casi 30 por los republicanos, aunque los porcentajes variaron mucho según los estados.
Casi cuatro de cada diez latinos (39 por ciento) dicen que les preocupa que ellos, un familiar o alguien de su entorno pueda ser deportado. Esa preocupación es aún mayor entre los inmigrantes, según una encuesta del Pew Research Center realizada en marzo de 2021 y publicada este lunes.
La iniciativa Un Día sin Inmigrantes cuenta con el apoyo de congresistas como Alexandria Ocasio-Cortez, de origen puertorriqueño, e Ilhan Omar, exrefugiada somalí y musulmana, ha movilizado a miles de personas desde que Espina, con más de dos millones y medio de seguidores en Tik Tok, la convocó hace menos de 15 días.
En su página de Facebook cuenta con el respaldo de casi 95 mil miembros y “más de 5 mil personas decidieron no ir a trabajar o cerrar sus negocios” este 14 de febrero para hacer oír su voz, aseguró Diana Fula, una coordinadora a nivel nacional.
“El Día de San Valentín es uno de los días donde más se gasta en Estados Unidos. Pero si no fuera por los inmigrantes, este día tan comercial no sería posible”, se lee en la página.
Leopoldo López, de 43 años y originario de Puebla, en México, fue uno de los que decidieron echar el cierre de su empresa de mudanzas en Nueva York.
“Nosotros aquí no estamos robando, estamos dando empleo. Yo empleo a 12 ciudadanos y viajo por todo el país donde necesito mano de obra y doy trabajo“, dijo a la AFP, “cansado de que los demócratas les estén engañando”.