En junio la cantante se pronunció por primera vez contra su padre, quien no le permitía hacer muchas cosas

Tras 13 años de vivir bajo la tutela de su padre, James Spears, la cantante Britney Spears fue liberada de ella, gracias a la decisión de la jueza Brenda Penny de Los Ángeles, California.

El fallo supone una nueva victoria para la artista, quien en junio pasado se pronunció por primera vez en contra de su progenitor, que dejó de ser su tutor en septiembre por orden de la misma jueza.

La custodia de la cantante se mantuvo entonces a cargo de un funcionario del estado de California y no ha sido hasta este viernes cuando Spears ha quedado finalmente libre de cualquier tutela legal.

Tras hacerse pública la decisión, cientos de seguidores de la cantante, de 39 años, congregados fuera de la sede de la Corte Superior de Los Ángeles reaccionaron de inmediato lanzando confeti rosa al aire y con cánticos a favor de Spears, que había tachado de “abusiva” su tutela legal con anterioridad.

En declaraciones ante ese tribunal en junio, Spears suplicó que le dejaran recuperar su vida y denunció que, aunque le gustaría tener un bebé, su tutor, en ese entonces su padre, no le dejaba ir al médico para quitarse el DIU (dispositivo intrauterino) que tenía insertado.

La cantante tiene una fortuna valorada en cerca de 60 millones de dólares.