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En el municipio han ocurrido 24 muertos, impunidad y un gobernador ausente.

Este sábado 15 de junio se cumple una semana desde que venció el plazo que el gobernador de Jalisco, Pablo Lemus, se impuso públicamente para devolver la paz al municipio de Teocaltiche. Sin embargo, lejos de cumplir su palabra, la violencia no sólo ha continuado, sino que se ha intensificado, mientras el gobierno estatal guarda silencio absoluto.

Desde el 23 de abril, cuando Lemus prometió pacificar la región, al menos 24 homicidios dolosos se han registrado en el municipio.

Entre las víctimas están tres funcionarios municipales: el director de la Policía, Ramón Grande Moncada (asesinado el 15 de abril); el secretario del Ayuntamiento, José Luis Pereira (28 de abril); y la regidora y excandidata a la alcaldía, Cecilia Ruvalcaba (9 de mayo). Todos ellos ejecutados a plena luz del día, en escenarios que exhiben el control absoluto del crimen organizado.

El crimen más reciente ocurrió el pasado el martes 3 de junio, cuando Angélica Judith Flores Sigala, una mujer de 30 años y madre de tres menores, fue asesinada a balazos en la colonia Centro. La víctima trabajaba en una empresa de paquetería en Villa Hidalgo. Poco antes del ataque, logró llamar a su madre para avisar que sus hijos estaban en la camioneta frente a su domicilio. Cuando la madre salió tras escuchar los disparos, encontró a los niños, pero no a su hija. Horas más tarde, el cuerpo de Angélica fue hallado sin vida.

En paralelo, la estrategia de seguridad del estado ha sido reprobada también en los tribunales. Dos hombres detenidos por la policía estatal y señalados como presuntos integrantes de la célula criminal de “El Coyote” fueron liberados por un juez federal al considerar que sus detenciones fueron arbitrarias e irregulares. A pesar de que portaban armas de fuego, el juzgador determinó que no existían elementos sólidos para vincularlos a proceso, dejando en evidencia fallas graves en la actuación policial.

Los detenidos, Juan Carlos “N”, alias “El Camello”, y José Luis “N”, fueron arrestados entre el 1 y 2 de junio en diferentes colonias de Teocaltiche. El secretario de Seguridad, Juan Pablo Hernández, los presentó como cómplices de “El Coyote”, presunto autor intelectual del asesinato de José Luis Pereira y señalado también por la Fiscalía como responsable de la ejecución de la regidora Cecilia Ruvalcaba.

A pesar de contar con una orden de aprehensión en su contra desde el 12 de mayo, la autoridad no ha logrado avanzar en el proceso contra “El Coyote”. Su nombre aparece una y otra vez como responsable de hechos sangrientos en la zona, pero las respuestas del gobierno han sido vagas o inexistentes.

Hoy, la promesa del gobernador de Jalisco ha quedado en letra muerta. Lejos de la pacificación anunciada, Teocaltiche sigue hundido en la violencia, con una comunidad que llora a sus muertos, una población aterrorizada y un gobierno estatal que ni habla ni actúa.

A una semana del incumplimiento del plazo, la pregunta que pesa en el ambiente es clara: ¿Dónde está el gobernador Pablo Lemus?