El Buró Federal de Prisiones confirmó que Arellano Félix, quien algún día fue uno de los capos mexicanos más buscados, ya no está bajo su custodia

Las autoridades estadounidenses liberaron este miércoles a Eduardo Arellano Félix «El Doctor», exlíder del Cártel de Tijuana, quien permaneció casi 10 años recluido en una prisión federal de Pensilvania.
Preso por los delitos de lavado de dinero y conspiración para el uso de ganancias ilícitas en territorio norteamericano, el narcotraficante salió de la cárcel esta tarde, sin que exista una orden de deportación en su contra.
Al tiempo, el Buró Federal de Prisiones (BOP) confirmó que Arellano Félix, quien algún día fue uno de los capos mexicanos más buscados, ya no está bajo su custodia.
Pese a que “El Doctor”, quien actualmente tiene 64 años, fue condenado originalmente a una pena de 15 años en prisión no completó su sentencia como resultado de su amplia cooperación con las autoridades estadounidenses, que comenzó en mayo de 2013 cuando se declaró culpable.
Su salida de una prisión estadounidense termina con un periplo que inició en 2008, cuando fue capturado en la ciudad fronteriza de Tijuana, Baja California, donde se enfrentó durante varios minutos con policías federales.
“El Doctor” permaneció cuatro años encarcelado en penales mexicanos. En agosto del 2012 fue extraditado a Estados Unidos bajo la acusación de asociación delictiva, lavado de dinero y narcotráfico. Sin embargo, estos cargos —que podían acarrearle la cadena perpetua— se diluyeron tras negociar con la fiscalía de Estados Unidos.
En los años noventa, la familia Arellano Félix sembró miles de cadáveres en su guerra contra el Cártel de Sinaloa. La batalla entre ambas organizaciones se recrudeció, luego de que los sinaloenses, entonces liderados por Joaquín el Chapo Guzmán, atentaron contra los hermanos Benjamín y Ramón Arellano Félix.
«El Doctor» se encontraba en una prisión federal de baja seguridad en Allentown, Pensilvania, según los datos de BOP. La página de información sobre el capo será actualizada para el final del día.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, anticipó el martes que el narcotraficante no sería deportado a México tras cambiar su “estatus” y posiblemente convertirse en “testigo protegido”.
“La información que tenemos es que se le cambió el estatus”, indicó el secretario de Relaciones Exteriores en la conferencia matutina del presidente López Obrador.