Después de estar al frente de los reclusorios de la capital del país por varios años, presentó su renuncia

Hazael Ruiz Ortega, dejó la Subsecretaría del Sistema Penitenciario de la Ciudad de México, informó el secretario de Seguridad Ciudadana, Omar García Harfuch.

García Harfuch dijo que se trató de una decisión personal y por el momento Enrique Serrano, está como encargado de despacho.

“No se decidió retirarlo, fue una decisión personal donde hoy continúa siendo parte de la Secretaría y en su momento daremos un reconocimiento por todos los años que ha trabajado”, expresó al concluir la comparecencia

Hazael Ruiz se mantuvo en el cargo desde la administración de Miguel Ángel Mancera en 2013 y fue ratificado por Claudia Sheinbaum en 2018.

Durante su gestión, hubo múltiples denuncias de corrupción dentro de las cárceles de la ciudad.

Se sabe que grupos criminales disputan el control de las prisiones y como parte de ese pleito, en los últimos cinco años al menos 20 custodios han sido asesinados al salir de trabajar o en sus días de descanso.

El personal penitenciario también ha sido amenazado mediante mantas, maniquíes, cabezas de cerdo y coronas fúnebres dejadas en puentes peatonales o cerca de las viviendas de los empleados de seguridad.

La principal amenaza surge del reclusorio Oriente que concentra el 30 por ciento de la población penitenciaria de la capital del país.

Ruíz Ortega tiene más de 20 años trabajado en el Sistema Penitenciario, ha sido director General de Tratamiento para Adolescentes de la CDMX, así como titular de diferentes penales, como Santa Martha Acatitla y el Reclusorio Oriente.

Durante su gestión, ocurrieron varias fugas de internos.

En 2008, cuando recién comenzaba su gestión, se fugó el narcotraficante Luis Gonzaga Castro Flores, del Reclusorio Oriente, quien trabajaba para Ismael “El Mayo” Zambada. Gonzaga logró salir por la aduana.

Entre octubre y diciembre de 2013, siete presos responsables de robo, homicidio y asociación delictuosa se fugaron de Santa Martha Acatitla usando boletas de libertad originales del Tribunal Superior de Justicia, pero con datos, firmas y sellos falsos.

En 2016, huyeron por la zona de juzgados Agustín Miranda Orozco y Roberto Sánchez Ramírez El Fugas, quienes estaban recluidos en el módulo de alta seguridad, conocida como Diamante, acusados por secuestro.

En enero de 2020, cuando tres internos de alta peligrosidad, ligados al Cártel de Sinaloa, escaparon de la Zona 1 del Reclusorio Sur. Según las autoridades penitenciarias, los tres internos salieron “caminando”.

Por este último caso, en el congreso de la Ciudad de México, exigieron su renuncia, pero no se las concedieron.