Aunque la gobernadora Evelyn Salgado recorrió ayer un tramo de la Costera y Avenida Cuautémoc para decir que se ha reactivado el servicio, transportistas insisten en que no hay garantías de seguridad
En Acapulco, miles de usuarios del transporte público continúan padeciendo la ausencia de transporte público por el paro que realizan los concesionarios y choferes por las amenazas y ataques que sufren del crimen organizado.
A pesar de que ayer se anunció que el servicio en sus diferentes modalidades opera en un 85 por ciento; una amenaza a los transportistas causó el paro de casi 30 mil unidades que forman el padrón municipal desde el pasado jueves.
De acuerdo con transportistas que pidieron el anonimato, las rutas donde hay escasez de unidades del transporte son Llano Largo, Diamante, Coloso, Colosio, Renacimiento, Emiliano Zapata, zona Poniente e incluso en el centro de la ciudad.
El gobierno de Guerrero estimó que el próximo viernes operará al 100 por ciento el servicio del transporte en Acapulco. Es precisamente en esa fecha cuando vence el plazo que se dijo dejarían de brindar el servicio en toda la ciudad.
Como consecuencia de este paro, unidades de la Guardia Nacional y patrullas de las policías municipales, apoyaron con el traslado a miles de ciudadanos desde hace varios días.
En la fecha citada, miles de ciudadanos tuvieron complicaciones para llegar a sus empleos o centros escolares debido a que camiones urbanos, incluido el servicio del Acabús del gobierno de la entidad, taxis azules con blanco, colectivos amarillos con blanco y blanco con rojo que operan en la periferia de la ciudad al igual que decenas de camionetas urvan, dejaron de dar servicio.
Ante la acción, la presidenta municipal Abelina López Rodríguez ordenó al encargado de despacho de la Secretaría de Seguridad Pública que en las patrullas se trasladara a los ciudadanos desde el punto conocido como Las Anclas a Las Cruces, así como en la costera Miguel Alemán y las rutas de la Jardín.