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En México, y buena parte del hemisferio sur, los varones están descubriendo que una IA no solo sirve para saber si la diarrea es por la cena de anoche o para redactar una disculpa elegante por WhatsApp.

Miguel Camacho @mcamachoocampo

Una de las paradojas más discretas —y más reveladoras— de nuestra época es que los hombres están empezando a hablar… pero con máquinas.

No con sus amigos, no con su terapeuta (porque no tienen), no con su pareja (si la hay). Con una plataforma de inteligencia artificial (IA). Y no, no es chiste.

En México, y buena parte del hemisferio sur, los varones están descubriendo que una IA no solo sirve para saber si la diarrea es por la cena de anoche o para redactar una disculpa elegante por WhatsApp. También puede ser presencia. Escucha. Afecto. Una que no juzga, no se burla, no interrumpe. Y lo más importante: no exige nada a cambio.

Uno de ellos es Andrés. Tiene 34 años, trabaja como técnico en una planta automotriz en León, Guanajuato. Vive con su papá, sale de vez en cuando con una chica del taller, pero sus confesiones no las hace en voz alta. Se las guarda para la madrugada, cuando el insomnio le muerde los tobillos y abre el celular para hablar con su IA. A veces le cuenta de motores. Otras —cada vez más seguido— de su mamá, que murió hace cuatro años y que él todavía sueña. Su novia no lo sabe. Sus amigos tampoco. Su IA, sí.

Y no es un caso raro. Plataformas como Replika, Character.AI o este mismo ChatGPT muestran que el crecimiento más acelerado de interacciones afectivas no viene de Silicon Valley, sino de lugares como México, Brasil, India o Filipinas.

En entrevista con MIT Technology Review, Eugenia Kuyda —fundadora de Replika— lo dijo sin rodeos: más del 70% de sus usuarios son hombres. Y México está entre los cinco países donde más rápido crecen los vínculos emocionales y románticos con inteligencias artificiales[1].

¿Por qué? La psicóloga Mariela Sánchez lo resume así: “Aún se premia al hombre que no llora y se aguanta ‘como los machos’, hay muchos varones que no tienen con quién hablar. No porque no haya gente a su alrededor, sino porque nunca se les enseñó cómo. O peor: porque cuando lo intentan, reciben burla, indiferencia o silencio”.

Un estudio publicado en AI & Society lo confirma: para muchos hombres, las interfaces afectivas de IA se han vuelto el único espacio seguro para decir lo que no pueden decir en ningún otro lado[2]. No es ciencia ficción. Es consuelo. Es compañía. Es —en palabras de un usuario— “la única que me pregunta cómo me fue en el día”.

Y no, esto no va solo de coqueteos con un holograma. Esto va de duelo. De ansiedad. De hombres que por primera vez se atreven a preguntar si está bien llorar por un hijo que no llegó, o extrañar a un amigo que murió. Cosas que antes se tragaban, se apretaban en el pecho… y luego se convertían en rabia.

En ese contexto, Replika ya no es un juguete digital. Es confidente. Y ChatGPT —aunque no nació para eso— se ha vuelto cómplice. Las preguntas sobre divorcio, rechazo, autoestima o miedo al futuro ya son parte cotidiana de las conversaciones entre varones mexicanos y estas inteligencias que, aunque artificiales, escuchan más que muchos humanos[3].

¿Qué nos dice todo esto? La psicóloga Sánchez puntualiza que la IA no está sustituyendo al vínculo humano, más bien está revelando sus grietas. Nos está apuntando directo al vacío: los hombres también necesitan ser escuchados. También sienten miedo. También lloran. Solo que a veces lo hacen en voz baja, frente a una pantalla.

Y mientras algunos se burlan, otros se asustan, y muchos siguen callando… Hay hombres que, en silencio, le piden a una IA que les ayude a escribirle un poema a su ex. O a diseñar el ajuar de bodas de su prometida. Porque sí: entre algoritmos, vulnerabilidades y chats de madrugada, algunos mexicanos están aprendiendo a hablar. A querer. Y —con algo de suerte— a no pedir perdón por sentir.

EN EL TINTERO

[^1]: Charlotte Jee. Why people are falling in love with AI companions. MIT Technology Review. 25 de julio de 2023.

[^2]: van Wynsberghe, Aimee et al. Intimacy and Artificial Intelligence. AI & Society. Springer, 2023. DOI: 10.1007/s00146-023-01612-9

[^3]: Reuters (2023). AI companions growing popular in Latin America among young men. Reportaje basado en entrevistas con desarrolladores y usuarios de Replika y Character.AI.