De acuerdo con la versión de sus compañeros, la residente de anestesiología sufrió un desmayo en el quirófano; sus superiores la enviaron a dormir y horas más tarde la encontraron muerta
Nicole Stark Carrillo, de 27 años, apenas comenzaba su carrera como médica residente de anestesiología. El pasado 15 de septiembre entró a una guardia en la Clínica 46 del IMSS, en Guadalajara pero ya no regresó a casa.
De acuerdo con testimonios de sus compañeros, en pleno quirófano se desvaneció. En lugar de recibir atención médica inmediata, fue enviada a descansar.
Horas más tarde, la hallaron sin signos vitales en su guardia. La autopsia señaló asfixia por causa indeterminada, aunque sus familiares no aceptan la versión oficial y exigen una investigación exhaustiva.
En contraste, el IMSS sostiene que sí recibió atención y que colabora con la Fiscalía de Jalisco para esclarecer lo ocurrido.
“Sobre este hecho, quiero informar que durante la mañana del 16 de septiembre se reportó el estado de inconsciencia de la médica, a quien se le brindó en forma inmediata la atención médica. A pesar de los esfuerzos de nuestro personal de salud, la paciente falleció», dijo el director del Hospital General Regional 46, Wilberto Gutiérrez Astorga.
El caso de Nicole ha generado indignación y muchas más preguntas que respuestas, dejando en la comunidad médica un profundo llamado a revisar las condiciones de trabajo en las guardias hospitalarias.