La secretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Edna Elena Vega Rangel, destacó que el evento marca un momento histórico en la política de vivienda del país y resaltó la transparencia del proceso
El Gobierno de México inició a nivel nacional, el sorteo de viviendas del Programa Nacional de Vivienda para el Bienestar, una estrategia diseñada para garantizar el acceso a un hogar digno a familias de menores ingresos.
Este modelo está dirigido específicamente a personas que no son derechohabientes del Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) ni del Fondo de la Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Fovissste).
Durante la conferencia de prensa matutina de este martes, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo dio el arranque al primer concurso. La mandataria explicó que se adoptó este mecanismo ante la alta demanda que superó el número de casas que se encuentran actualmente en construcción.
La inscripción para estos domicilios que están a cargo de la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), se realizó tanto en asambleas territoriales cercanas a las obras como por internet.
Tras una revisión inicial para verificar que las familias cumplieran requisitos —como no contar con seguridad social en vivienda y acreditar su situación económica— se determinó que el sorteo era el método más justo para la asignación.
«Decidimos que se hiciera por sorteo, porque es la forma más justa dentro de las circunstancias para poder distribuir las viviendas,» subrayó Sheinbaum Pardo.
Las autoridades federales detallaron que entre hoy y mañana (miércoles) se llevarán a cabo 154 sorteos en 30 entidades federativas y 147 municipios. Estos eventos servirán para seleccionar a las primeras familias beneficiarias de un universo inicial de más de 161 mil personas registradas.
Rodrigo Chávez, representante de la Conavi, explicó el método utilizando un ejemplo de uno de los desarrollos participantes, el cual fue en el municipio de Chignahuapan, Puebla, donde se registraron 444 familias para 256 viviendas.
En este desarrollo en particular, la distribución es la siguiente:
• El 20% de las viviendas (51 unidades) serán destinadas a renta para jóvenes que estudian y trabajan.
• 66 viviendas se asignarán de manera directa a personas adultas mayores y personas con discapacidad.
• Las 139 viviendas restantes serán definidas mediante tómbola pública.






