La víctima vendió su auto y entró a una tanda para pagar la intervención quirúrgica
Una joven de 25 años, identificada como Jaqueline Briones Torres, originaria de Saltillo, Coahuila, perdió la vida luego de someterse a una cirugía estética de liposucción en un consultorio de la colonia Obispado en Monterrey.
El Colegio de Cirujanos Plásticos, Estéticos y Reconstructivos de Nuevo León comunicó que los profesionales que realizaron la intervención no estaban afiliados a su gremio.
De acuerdo a los primeros informes, la víctima originaria de Saltillo, habría financiado una lipoescultura mediante una «tanda». Incluso, vendió su auto para poder cubrir el costo de su operación.
Trascendió que la financiera donde la mujer hizo el trámite, publicó en sus redes sociales una fotografía de la víctima, donde se le veía portando el número 973.
«No de cliente. 973, nos apasiona hacer realidad tus sueños», se lee en la publicación.
Los hechos ocurrieron en un establecimiento localizado sobre la calle Hidalgo #2532 en Monterrey. De acuerdo con la información preliminar, durante la intervención médica de tipo «liposucción» surgieron complicaciones que pusieron en riesgo la vida de la paciente.
Ante la situación, el personal de la clínica decidió trasladarla de manera urgente al Hospital Universitario para que recibiera atención especializada. Sin embargo, pese a los esfuerzos del equipo médico, se confirmó su fallecimiento.
La causa exacta de la muerte aún no ha sido dada a conocer por las autoridades, quienes se encuentran recabando información para determinar si hubo negligencia médica o fallas en el procedimiento.
