El hijo del Chapo Guzmán se convirtió en testigo protegido del gobierno de Estados Unidos; en su audiencia de este lunes, admitió haber participado en el secuestro de El Mayo Zambada
Durante su audiencia de este lunes en una corte federal de Chicago, Joaquín Guzmán López, hijo de El Chapo Guzmán, se declaró culpable de tráfico de drogas y crimen organizado.
Con esta determinación, Guzmán López se ha convertido en testigo colaborador de los Estados Unidos, al igual que su hermano Ovidio.
Joaquín Guzmán López admitió por primera vez haber engañado a El Mayo Zambada para reunirse con él en julio de 2024, alegando que necesitaba ayuda para resolver una disputa.
Cuando Zambada llegó, Guzmán López lo condujo a una habitación privada donde había retirado en secreto una ventana que iba del suelo al techo. Allí, unos hombres entraron, lo ataron con cuerdas y le pusieron una bolsa en la cabeza, según el acuerdo de culpabilidad.
Posteriormente, Zambada fue subido a una camioneta y conducido a una pista de aterrizaje cercana, donde lo obligaron a subir a un avión privado con Guzmán López.
Guzmán López le dio una bebida con un sedante antes de que el vuelo despegara hacia Nuevo México, donde ambos fueron detenidos por las autoridades estadounidenses.
Guzmán López, de 39 años, ha estado bajo custodia estadounidense desde que llegó a Texas en un avión fletado en julio de 2024 con Zambada atado, lo que marca un dramático final para los 40 años de El Mayo al mando.
La jueza federal de distrito Sharon Johnson Coleman no fijó de inmediato una fecha para la sentencia el lunes debido a que el caso está en curso.
