La iniciativa se incluyó dentro de Paquete Fiscal que remitió el gobierno estatal al Congreso local la semana pasada y ya analizan los diputados que conforman la 61 Legislatura
La gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, propuso elevar la edad mínima de jubilación de 62 a 65 años de los trabajadores del gobierno estatal para garantizar la viabilidad financiera del sistema estatal de pensiones. La iniciativa forma parte del paquete fiscal recientemente enviado al Congreso local.
Según el documento remitido, esta medida no se aplicaría de forma inmediata y generalizada, sino que prevé un esquema de transición escalonada, con periodos de adaptación, para que quienes se acerquen a la edad de retiro puedan planear su futuro.
El argumento en favor del ajuste es la creciente presión financiera que sufre el Issemym —el instituto de seguridad social estatal—, derivada del número creciente de pensionados en relación con la base de cotizantes, lo que pone en riesgo su sostenibilidad.
Con esta reforma, las autoridades pretenden aliviar la carga presupuestal del instituto, evitando futuros déficits cuyo costo, según estimaciones internas, podría crecer si no se revisan las reglas actuales de retiro.
El plan ya está siendo analizado por la legislatura estatal, que podría dictaminarlo antes del 15 de diciembre. Dependiendo del calendario de aprobación, para algunos trabajadores la nueva edad de jubilación podría empezar a aplicarse en los próximos años.






