«Se estuvo llamando a los números de emergencias de la estatal, la Guardia Nacional y nadie respondió, los dejaron moverse a sus anchas por más reportes que hizo uno»
Teocaltiche, Jalisco vivió otra noche y madrugada en la zozobra tras un nuevo ataque armado del crimen organizado sin que ninguna autoridad, de los tres órdenes de gobierno, atendiera los llamados de emergencia.
«Es como si para ellos no pasara nada», dijo a este medio un habitante, quien aseguró que hubo varios vehículos circulando por el pueblo, entre ellos, uno blindado tipo monstruo.
«Se oían sus radios, como cortaban cartucho y lanzaban varios disparos», narró en otro mensaje a este medio, un habitante.
Uno de los ataques de los que hasta esta mañana permanece la evidencia es el ataque a dos viviendas en la San Miguel, donde quedaron decenas de casquillos de arma larga tirados en la banqueta y la calle y marcas de las perforaciones que hicieron las balas en la fachada.
«Se estuvo llamando a los números de emergencias de la estatal, la Guardia Nacional y nadie respondió, los dejaron moverse a sus anchas por más reportes que hizo uno».
Hay que recordar que en Teocaltiche hay, por ahora, una base de la Guardia Nacional, un destacamento de Defensa, más de 13 unidades de la policía estatal y 8 unidades de otros municipios de la región de Los Altos. Y ninguno de esos efectivos hizo acto de presencia.
Lo increíble es que desde el 7 de junio, se suponía que el municipio iba a estar completamente en paz, pues así lo prometió el gobernador Pablo Lemus, quien ayer salió de viaje hacia Asia.
Imaginese si esto es la pacificación que prometió, no queremos pensar qué más sigue.
