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Desde el domingo, personal de la FGR proveniente de la Ciudad de México se trasladó a Reynosa para iniciar una investigación exhaustiva

Al menos 60 armas entre largas y cortas, así como dosis de droga, fueron robadas de una bodega de la la delegación de la Fiscalía General de la República (FGR) en Reynosa, Tamaulipas.

El atraco ocurrió el sábado en un inmueble ubicado en el Anillo Periférico Hidalgo en Reynosa.

De acuerdo con los reportes disponibles, un grupo de infiltrados, presuntamente apoyados por personal de confianza de la FGR, logró sustraer al menos 60 rifles de asalto, armas cortas y drogas del depósito de evidencia. Según las primeras investigaciones, el acceso fue facilitado por un secretario de reciente ingreso, quien habría permitido la entrada del grupo delictivo.

El modus operandi incluyó el uso de herramientas especializadas, como sopletes y sierras, para forzar candados y puertas de acero que resguardaban el armamento. El hecho ha sido calificado como un grave descuido por parte de las autoridades encargadas de garantizar la seguridad de las instalaciones, encabezadas por Ernesto Vázquez Reina y su equipo de trabajo.

Desde el domingo, personal de la FGR proveniente de la Ciudad de México se trasladó a Reynosa para iniciar una investigación exhaustiva. Entre las acciones se incluyen la revisión de videos de seguridad, identificación de los vehículos utilizados y el seguimiento a los posibles facilitadores del robo.

La magnitud de este incidente pone en evidencia la falta de controles internos y la vulnerabilidad en las medidas de seguridad de una institución que, por su naturaleza, debería ser un modelo de resguardo y confianza para la ciudadanía. Es imperativo que se implementen reformas inmediatas en los protocolos de seguridad, además de garantizar que los responsables, tanto directos como indirectos, enfrenten las consecuencias legales correspondientes.