En esa zona opera el grupo criminal Los Ardillos; los pobladores rechazan la presencia de soldados y policías

Los militares que fueron retenidos por pobladores en Quechultenango, Guerrero, fueron liberados la noche del miércoles.

Desde la tarde de este miércoles, los pobladores bloquearon accesos al ayuntamiento para exigir la salida de las fuerzas federales y en la noche del mismo día, alrededor de 200 personas rodearon a los militares y los escoltaron hasta la salida de la cabecera municipal.

Quechultenango se ubica en una zona donde opera el grupo delincuencial Los Ardillos, responsable de la violencia reciente en esa región.

En los días recientes ha perpetrado varias ejecuciones, entre ellas la de Mario Zamora, miembro de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero y de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en la entidad. Pasadas las 23 horas, los retenidos fueron puestos en libertad.

Según las imágenes del reportero Jonatan Mendoza, los pobladores exigieron que los militares se retiraran de la localidad de Quechultenango al grito de “¡fuera gobierno!“ y los escoltaron a la salida de la localidad.

En un comunicado, la Mesa de Coordinación para la Construcción de la Paz estatal detalló que autoridades federales y estatales tuvieron que trasladarse al sitio de los hechos para mantener un diálogo con los habitantes de dicho municipio de Guerrero.

“Por lo anterior se estableció una mesa de trabajo escuchando las peticiones de los habitantes inconformes y tras llegar a acuerdos fueron liberados los uniformados”, indicaron.