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La toma de protesta de estos nuevos jueces representa un cambio significativo en la forma en que se selecciona a los miembros del Poder Judicial Federal.

La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tomó protesta a 23 nuevos jueces de Distrito el pasado, marcando un hito en la historia del Poder Judicial Federal.

Estos jueces, seleccionados a través de concursos de oposición, serán los últimos en ser elegidos por la vía tradicional de la carrera judicial. A partir del próximo año, la selección de jueces se llevará a cabo mediante el voto popular.

La ceremonia de toma de protesta, celebrada en un salón del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) en San Ángel, se llevó a cabo de manera privada. A diferencia de ocasiones anteriores, la sesión no fue transmitida por el Canal Judicial.

Durante el evento, el ministro Luis María Aguilar Morales y la consejera Lilia Mónica López Benítez dirigieron palabras a los nuevos jueces.

El ministro Aguilar Morales destacó el esfuerzo y la dedicación de los nuevos juzgadores, quienes, según él, habían ganado su puesto gracias a su trayectoria judicial y a la aprobación de rigurosos exámenes. «Solo así te ganas legítimamente el cargo», enfatizó el ministro.

La consejera López Benítez, por su parte, hizo hincapié en la importancia de la carrera judicial como camino para llegar a ser impartidor de justicia.

La sesión no contó con la asistencia de todos los ministros del Pleno.

Esta toma de protesta se suma a las realizadas en mayo pasado, donde 46 jueces de Distrito recibieron sus credenciales, y en enero de este año, donde 62 jueces de Distrito y magistrados de Circuito fueron juramentados. Entre estos últimos se encontraban aquellos que han tenido a su cargo casos de gran impacto en el sexenio actual, incluyendo algunos que han dictado sentencias adversas al gobierno federal.

La toma de protesta de estos nuevos jueces representa un cambio significativo en la forma en que se selecciona a los miembros del Poder Judicial Federal. El futuro de la impartición de justicia en México dependerá en gran medida de la capacidad de los nuevos jueces para mantener la independencia y la imparcialidad en su labor.